- Área: 180 m²
- Año: 2016
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Fotografías:Lorena Darquea
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Proveedores: Deyesos, Edimca y Acymco, Hormipisos, Lámina asfáltica
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Proyecto Retoños se destina a una familia de muchas familias. Alvaro y María son los clientes que buscan una casa para el gran conjunto de 16 miembros –entre sus hijos y nietos-. Siendo una familia unida, se encuentran con regularidad; por ahora, lo hacen en un pequeño departamento en Quito, pero buscan un espacio más amplio que se aleje del ruido y ambiente gris de la ciudad.
El terreno se ubica en el Valle de los Chillos en la Armenia, frente al Parque Metropolitano. Por primera vez, tienen un terreno con posibilidades de armar su jardín propio y espacio suficiente para reunirse. El proyecto tiene dos propósitos: aprovechar la naturaleza del contexto y construir un espacio para reunir a la familia grande y heterogénea.
La propuesta es una barra alargada de dos plantas que ocupa una mínima cantidad de terreno; una casa rodeada de verde. Se respetan retiros laterales y se dejan dos jardines: posterior privado y frontal. En medio de la barra, un paso a manera de jardín interior, junta los dos retiros laterales a través de dos puertas plegables amplias. Una vez abiertas, las puertas funcionan como un doble acceso a la casa y conjugan la circulación entre el gran jardín circundante y las áreas interiores.
La estructura aporticada de madera cubre toda la luz transversal, reduciendo la cantidad de paredes internas. El resultado es una constante comunicación interior-exterior desde el frente, con su ingreso principal, hasta el cerramiento en el jardín posterior. Se evitan de circulaciones o espacios aislados, por lo que los servicios se distribuyen en un costado de la barra, entre circulación vertical, sanitarios y cuarto de lavado.
El programa arquitectónico prioriza áreas comunales; los espacios privados se reducen a un cuarto máster. El resto del proyecto es un gran espacio de estar donde no existen barreras; en segunda planta, un área abierta pasa de ser una sala de reunión a un cuarto privado a través de una puerta plegable y algunos cojines al piso. Las dos plantas del proyecto se unen a través dos dobles alturas en la franja de jardín interior; sobre uno de los huecos, cuelga una malla a manera de hamaca.
Finalmente, las paredes internas y externas se construyen en seco con paneles de varios tipos. La modulación se basa en las medidas estándar de las planchas y se distribuyen buscando el menor desperdicio. En el exterior, planchas machihembradas de fibrocemento hidrofugado, se juntan a manera de cascarón para proteger la estructura de madera. En el interior se usan paneles de OSB y fibrocemento regular para baños. Los paneles se usan como vienen y se evitan acabados para hacer eficiente el armado de paredes.